El 10 de mayo es una de las fechas más queridas y significativas en México, ya que se celebra a todas las madres, rindiendo homenaje a esa figura materna que nos ha acompañado a lo largo de la vida con su apoyo y amor incondicional. Aunque es un día ampliamente reconocido, pocas personas conocen su origen.
El Día de las Madres, tal como lo conocemos hoy, surgió en 1908 en Estados Unidos. En ese país, comenzó a gestarse una celebración similar gracias a Anna Marie Jarvis, quien se convirtió en un símbolo por su lucha para que se reconociera la importancia de las madres en la sociedad.
Ella propuso el segundo domingo de mayo como fecha oficial. Esta celebración buscaba fortalecer los lazos familiares y fomentar el respeto hacia las figuras parentales. No fue sino hasta 1914 cuando el Congreso de Estados Unidos declaró oficialmente el Día de las Madres como una fiesta nacional.
A partir de entonces, muchos países adoptaron esta iniciativa y establecieron su propia fecha para conmemorar a las madres.
En México, la idea de dedicar un día especial a las madres surgió gracias a José Vasconcelos, quien en ese entonces se desempeñaba como secretario de Educación.
Su propuesta recibió el respaldo del Episcopado, la Cruz Roja Mexicana y el Papa Pío XI.
Se eligió el mes de mayo por su significado dentro de la tradición católica, al estar consagrado a la Virgen María, y también por representar la primavera, el renacimiento y la nueva vida.
Cabe destacar que el 10 de mayo de 1949 se inauguró el Monumento a las Madres, ubicado en el Jardín del Arte de la Ciudad de México.
Periodista de carrera con más de 30 años en el medio.
